Lo importante es el «concepto»

Todos los que hemos trabajado en departamentos de Marketing, especialmente en empresas grandes, estamos acostumbrados a vincular acciones de comunicación y/o promocionales con resultados directos – o sea VENTAS – como algo lógico y habitual.  Y claro, ahora resulta que en las empresas están las mismas personas, pero tienen menos pasta, encima están vendiendo menos, y no paran de leer en los medios tradicionales y en las publicaciones del sector que los «Social Media» son la bomba, la salvación, la revolución, y «the place to be». Resultado? Cornada desde arriba a los de Marketing, e instrucciones precisas de que la empresa TIENE que estar ahí. Normalmente acompañado con un «tienes 2 meses, y no voy a dotar presupuesto, que en Internet todo es gratis».

Con un poco de suerte, y si la empresa es seria, se pondrá en contacto con alguien que les pueda asesorar. Si no lo es, meterán a alguien de prácticas, o a alguien que ya está en la empresa y que está «todo el día metido en Internet» a gestionar las acciones. Y exigirán resultados – los mismos resultados, y en el mismo plazo – que si hubieran lanzado un spot de 30» en prime time. Y eso no es así.

Una campaña tradicional de comunicación (con su spot de TV, prensa, exterior, radio…) es como pasar por el cirujano. Puedes entrar gordo y arrugado y en 20 días – y tras dejarte una pasta gansa – estás, si el cirujano era bueno, decente. Una acción promocional (descuento en precio, 2×1, regalo por compra…) bien comunicada (al canal o al consumidor final, según el caso) es como una dieta agresiva. Si empiezas gordo, en 20 días habrás perdido 4 o 5 kilos y te verás mejor, pero a lo mejor en otros 20 días tienes «efecto rebote» y los recuperas (o sea, dejas de vender en cuanto acabas la promo).  Una estrategia de Social Media – que no campaña !! porque debería ser un camino de no retorno – es como ir al gimnasio. Si empiezas gordo….lo primero es darte cuenta de que eres gordo, y que probablemente en chandal se notará aún más. A partir de ahí, te va a tocar meterle fuerza de voluntad, constancia y perseverancia. Vas a sudar mucho, te vas a ahogar en ocasiones y como te metas a alguna clase (que son como los grupos de Facebook o de LinkedIn) no vas a saber  ni por donde te da el aire. Todos tienen clara la coreografía y tú estás perdido…..y avergonzado. Suficiente como para mandar el chándal, las zapatillas y el gimnasio a dónde tú y yo sabemos. Pero si eres constante, y lo conviertes en hábito, al cabo de 6 u 8 meses estarás mucho mejor que antes de empezar, y hasta lo echarás de menos si algún día no puedes ir. Serás más consciente de tu cuerpo y de tus limitaciones, pero también habrás descubierto habilidades que ni sabías que tenías. Probablemente habrás cambiado tu alimentación, tu forma de vestir y tu expresión corporal, y te moverás con mucha más seguridad. Habrás conocido a gente interesante, que te descubrirá nuevas posibilidades y que te dará alas para afrontar nuevos retos. No te resulta tentador? Si tienes dudas, o si quieres acelerar la adaptación y reducir – nunca eliminar – la posibilidad de lesiones, siempre puedes contratar un entrenador personal, que esté a tu lado en todo momento y que te ayude en los primeros pasos. Que te enseñe los movimientos, te ayude a comprar las zapatillas adecuadas a tu peso y actividad, que te motive y te haga un seguimiento hasta que puedas volar solo. Ahora, eso si, las abdominales, las vas a tener que hacer tú…

Hasta que esto no cale en las empresas, me temo que seguiremos teniendo situaciones tan absurdas como que un cliente te pida tener 3.000 followers la semana que viene, incluso antes de haber definido la estrategia, o incluso el canal a utilizar. Ay, si quien lo pide tuviera que hacer 1 abdominal diario por follower….

Paz !

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Lucas

Mi nombre es Lucas. Generación del 71. Soy Harlysta, esquiador y eMTBiker. Trabajando en el mundo del Marketing y la Comunicación desde 1994. Por cuenta propia desde 2006, ayudando a las marcas a (re)conectar con sus clientes. Y eso suele incluir repensar mensajes, beneficios, textos, estrategia de marca, canales, audiencias y formas de contarlo. Con un gran peso de todo lo digital, como es natural en estos tiempos.

Comentarios

  1. Muy bueno, muy bueno Lucas. Buena cura de sentido común a los que manejamos «hierros» y podríamos llegar a pensar que lo que está en la pantallita es virtual….
    Por cierto, un placer encontrarte el otro día, y públicas gracias por la lección de mecánica que nos diste arreglando la bici de mi chico en un abrir y cerrar de ojos!

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