¿Volverán a ser los comentarios EL indicador?

En una semana en la que la crítica al aspecto exterior ha sido uno de los temas más comentados, puede ser este un buen momento para repensar y replantearse si eso mismo se aplica a nuestros mundos digitales. Y lamentablemente, también se aplica. Vivimos en un mundo obsesionado con los elementos externos como indicadores de todo y aquí, también. Que si el número de followers, el número de likes, las veces que algo se comparte… ¿son esos realmente indicativos? Pues como siempre, depende.

Ya daba mi punto de vista en un post anterior («La influencia es relativa«) pero creo que me va a tocar insistir. Alguien sólo es influyente si consigue despertar reacciones. Si no lo consigue, no es influyente, sino que es un ser ignorado. Y si encima de no conseguirlo, se «cree alguien«, lo que es es un ignorante.

Pero claro, si aplicamos la máxima de que «lo que no se cuenta no existe«; existe algún indicador «externo» de la capacidad de despertar reacciones? Hasta hace no poco, el número de veces que un contenido era compartido era un buen indicador. Personalmente, a mi ego le encantaba ver cuando algún post superaba la cifra de 1.000 o más compartidos. Pero ese indicador ya no vale. Si echáis un vistazo a los últimos posts de este blog veréis que esa cuenta ha pegado un bajón muy importante en los últimos meses. Y no es porque hayan bajado las visitas o porque hayáis estado menos activos. Es simplemente porque Twitter decidió hace unos meses dejar de aportar esa información. Y en un blog como este, twitter era el principal canal de distribución. Y lo sigue siendo, pero ahora «no se ve«. ¿Hace eso que los posts sean peores? En principio, no. ¿Hace que, para el nuevo visitante, el blog «mole» menos? Seguramente si, porque tiene menos «medallas»

Una vez más queda demostrado que hacer depender una métrica clave de un tercero, puede acabar volviéndose en contra. Ese tercero decide cambiar las reglas de juego, y estás vendido. Y no me refiero sólo a la bajada del reach y a la necesidad de pagar para conseguir visibilidad, sino que ¿imagináis que pasaría si vuestra marca, después de invertir miles de euros y horas en construir una página potente en Facebook, se levantara un día para ver que su página había desaparecido? Pues puede pasar. De hecho, hace poco le pasó a la gente de Social Media Examiner (400k fans) y ellos en gran medida dependen de Facebook como plataforma de visibilidad, así que el problema era mayúsculo. Fue un error y se solucionó, pero ya veis que nadie está a salvo.

¿Y qué métrica tenemos los blogs (en realidad es aplicable a cualquier otra propiedad digital) de interés e interacción? Los comentarios. Cada vez más escasos. Cada vez más difíciles de arrancar a los lectores (son muchos más clicks que un like/tweet, y son poco compatibles con los contenidos consumidos en movilidad) y quizás por eso ¿cada vez más valiosos? Desde luego, el conseguirlos o no si que va a depender directamente de la calidad (o la procacidad) del contenido. Y eso ya es responsabilidad directa del autor (salvo que seas cabronazi, claro, en cuyo caso te limitas a robar y no citar y ya).

Desde luego que seguiremos dependiendo de los canales sociales como canal de transmisión, pero ¿volverán las comunidades a renacer? ¿O simplemente nos tocará cambiar el chip a nosotros – cada vez cuesta más atraer visitas a sitios específicos de temas como los que aquí trato – y dejar de pensar que somos bloggers, y pasar a pensar que somos «escritores«?. Y un escritor, igual que un columnista, escribe allá donde está la audiencia, no sólo en su casa. ¿Deberíamos de buscar «ojos«, y pasar a considerar irrelevante las páginas (propias) vistas? ¿Deberíamos dejar de pensar que salir «de casa» y pasar a volcar contenidos en otros sitios (e incluso en otros formatos, como decía en el post de la semana pasada) no sólo no diluye, sino que fortalece la marca? Quizás…

Paz!

L.

PS.- A la vista de lo que aquí digo, y por ser coherente, me estoy planteando seriamente el eliminar completamente de la vista la información del número de veces que los posts son compartidos (manteniendo los botones de compartir, obviamente), y dejar visible únicamente la cifra de comentarios. ¿Os parece una locura?

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Lucas

Mi nombre es Lucas. Generación del 71. Soy Harlysta, esquiador y eMTBiker. Trabajando en el mundo del Marketing y la Comunicación desde 1994. Por cuenta propia desde 2006, ayudando a las marcas a (re)conectar con sus clientes. Y eso suele incluir repensar mensajes, beneficios, textos, estrategia de marca, canales, audiencias y formas de contarlo. Con un gran peso de todo lo digital, como es natural en estos tiempos.

Comentarios

  1. Post extenso si lees los enlaces complementarios Lucas. Vamos por partes y entro primero en la de Facebook, el concepto es que allí estamos de alquiler y sin previo aviso y sin anestesia nos pueden eliminar una página o perfil porque sí. En el caso de SME tienen un «megáfono social» que puede hacer moverse a FB pero para un negocio local que recibe X reportes sobre una publicación le cierran la página y puede irse el trabajo de varios años por la borda. Esto, te lo digo porque el año pasado he vivivo como esto ocurría con dos negocios y produce, cuanto menos, impotencia. Pero es el casero el que manda y los usuarios los que le bailamos el agua. Por otro lado respecto a los indicadores externos, medir es imprescindible, por supuesto pero para un blogger (pongo este ejemplo) la métrica más importante deberían ser las lecturas que se conviertan en lo lo que busque uno con cada post.

    Me imagino que te haya pasado con algún artículo que haya tenido más shares que lecturas ¿o no? ¿Qué es mejor que te compartan o que te lean y comenten? Efectivamente pienso que vivimos un poco obsesionados con lo que pasa de puertas para afuera sin analizar en gran medida lo que tenemos dentro. Cada uno es un mundo con sus objetivos o sin ellos…

    Saludos y gracias por la inspiración en cada artículo de este blog, con o sin medallas lo seguiremos leyendo y compartiendo en gran medida.

    1. Gracias Tatsu!

      Siempre he defendido esa teoría de «propietario vs alquiler» (entiéndase como blog vs redes) pero últimamente, si bien sigo defendiéndola, empiezo a variar ese concepto. Efectivamente la métrica es lecturas pero, ¿han de ser necesariamente en nuestra propia casa? En realidad a mi me daría igual que me leyeran aquí, en una Facebook note, en Médium o en una publicación de Linkedin. De hecho, he probado a replicar los posts en todos ellos, aunque siempre acabo volviendo «a casa».

      En cuanto a lo de SME desde luego que su capacidad de presión (y sus contactos) no tienen nada que ver con los de la inmensa mayoría de usuario, y con todo y con eso… les cerraron la página. Bonito toque de atención a TODOS…

      Gracias por pasar y por comentar! 😉

      1. Estoy contigo, pero quizás todo lo terminamos derivando a casa porque es dónde mejor podemos medir con menos intermediarios. El casero abre y cierra el grifo como manda su algoritmo y lo que nos funciona hoy mañana tal vez no. Y lo que queda en casa perdura… Cada día pienso más que por el camino de la presencia se pierde el tiempo de la interacción y al final la segunda es la gasolina para una primera fuerte. Muchas variables que hay que diseñar, aplicar y medir de dentro hacia fuera y no viceversa…

        Un auténtico placer.
        Saludos.

  2. La mayoría de veces de acuerdo contigo. Explicas lo que yo no soy capaz de transmitir, y siempre me siento identificado con tu mensaje, el cual comparto.
    Nos obsesionan las cifras del ego (a mi el primero, por mi poco tráfico y participación doy saltos de alegría si comparten, no te cuento si comentan, que no es el caso), pero lo que de verdad refleja lo bueno de una bitácora es la interacción comunicativa, comentar y dialogar, el resto es fachada.

    Un abrazo y a seguir dando caña!

    1. Obviamente, a nadie le amarga un dulce, y sería bastante hipócrita decir que cuando escribimos no lo hacemos con la intención de ser leídos, y que si es por 10 es mejor que por 1, si es por 100 es mejor que por 10 y si es por 1.000 es mejor que por 100.

      Gracias por pasar y por comentar!

  3. Fuera de los egos lo bueno es que en un blog los comentarios suman al contenido. Cuando engancha siempre pasas por los comentarios. Dime quienes son tus comentaristas y te diré qué blog tienes… 😛

    Sobre lo de quitar el número de comparticiones no creo que variara nada, de hecho eres uno de los pocos que mantiene el número de tuits. Lo ideal sería poder quitar los botones completos y que los integraran los navegadores…

    Saludos y que sigan los comentarios 🙂

    1. Eso va por temporadas también, que de vez en cuando vienen oleadas de comentarios «intrancesdentes» (de los de «buen post» o «yo pienso igual que tú») que salvo el «hacer pandilla» sirven para poco más, o bien comentarios de los de spam (te comento para colarte un enlace) o de los de dar lecciones. Con lo que mejoraría todo si los comentarios siempre aportaran, la verdad, porque yo pienso como tú – y así lo digo en el mail que envio a suscriptores – que muchas veces los comentarios son incluso mejores que el contenido. De hecho, son en parte la gasolina para seguir adelante…

      Gracias por comentar! 😉

  4. Me gustaría creer que sí, sobre todo ahora que estamos todo el día corriendo ;D
    Al poner un comentario, al menos sabes que el usuario ha llegado al final de la pagina y «algo» se habrá leído.

  5. Primero de todo, decir que es la primera vez que visito tu blog y me resulta francamente interesante.
    Es difícil encontrar contenido realmente útil, ágil y aplicado. Y sobretodo, de calidad.

    En mi opinión, los comentarios son vitales. Nos dan el pulso real de lo que hacemos y cómo realmente ha calado nuestro mensaje. De como es la relación con nuestro público. Es como si los clientes de una tienda no hablaran con el vendedor. Se limitaran a pasar por caja sin decir nada más. Sin feedback ni comentarios sobre la compra, la consulta o la necesidad. Y el propietario tuviera que basarse sólo en datos cuantitativos «fríos».

    Es cierto que cada vez cuesta más, como decías, arrancar 4 palabras a los usuarios, pero estoy 100% de acuerdo en que si las cosas realmente aportan algo, resultan interesantes para el lector, no sólo las lee sino que las persigue.

    ¡Buen trabajo y hasta el siguiente comentario!
    Saludos

    1. Totalmente, Cristina, y me parece muy buena analogía la de los compradores mudos que planteas! Pero la triste realidad es que muchos llegan, «consumen» y se van, sin interacción adicional. Se hablaba en tiempos de la regla del 90-9-1 (90 consumen, 9 comentan, 1 crea el contenido) y no se yo si nos hemos desviado mucho de esa regla con el paso del tiempo…

      Gracias por pasar, y por comentar!

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