Las marcas siguen hablando solas

Estos últimos días, arrancando nuevo proyecto con nuevo cliente, he estado identificando competencia y analizando un poco su presencia en redes. Nada tecnológico, simplemente navegando y tirando del hilo, para entender poco a poco el sector, los key players, sus mensajes y el tipo de interacción que despiertan.

Varias de las marcas que he ido descubriendo tienen perfiles con decenas e incluso centenas de miles de «fans» en sus perfiles de Facebook e Instagram. Hasta +600k en algún caso. Publican regularmente contenidos originales, cuidados, y en todos los formatos «recomendados«. Fotos, videos, infografías, citas, how-to’s… ya sabes a lo que me refiero.

Pues bien, con todo y con eso, la INMENSA mayoría de publicaciones tienen entre 15 y 80 likes. WTF?? ¿Con 200k, 300k o incluso 600k «fans» ese nivel de interacción? Aquí está pasando algo.

Que sí, que soy consciente de la tremenda bajada de alcances por culpa de los algoritmos (y la saturación de contenidos), que sé que los usuarios somos cada vez menos proclives a la interacción, pero ¿esos niveles tienen sentido? ¿sigue mereciendo la pena la inversión de estar presentes? ¿a qué estamos jugando?

De entrada, se me ocurren dos conclusiones:

  • A los usuarios no les importa lo que esas (y muchas otras) marcas tienen que decir
  • A las marcas no les importa que a los usuarios no les importe.

Y lo segundo me preocupa más, o cuando menos me resulta muy esclarecedor de la realidad. Ellas, las marcas – buenos, sus agencias – siguen publicando porque creen/les han dicho que es-lo-que-tienen-que-hacer y punto. Vamos, lo que toda la vida ha sido un diálogo de besugos. Les da igual que no haya nadie al otro lado. Ellas sueltan su mierda y se piran. Ya han cumplido. Ya pueden seguir con lo realmente importante.

La desconexión entre marcas y usuarios tengo la sensación de que – por mucho que la maquillemos con perfiles en redes sociales, webs molonas, blogs y demás fanfarrias – es cada vez mayor. Y en el fondo de la situación sigue estando la misma razón. A muchas marcas les dan igual los usuarios, lo que quieren es vender. Y por otro lado al usuario le da igual la marca, lo que quiere es molar más o ser más listo que el vecino de al lado y comprar cosas mejores, más baratas o que el otro no tenga o pueda tener.

Solo unas pocas consiguen despertar ese «algo más» que hace falta para generar comunidad. Solo unas pocas consiguen realmente conectar. ¿Y qué es lo que les diferencia? Que tienen valores, que tienen una historia REAL que contar detrás, que tienen claro qué hacen y para quién lo hacen. E incluso por qué lo hacen. Y se centran en transmitir eso. Y es eso lo que hace que sean LOS USUARIOS los que quieran usar/lucir la marca. No todos, pero sí aquellos en los que esa historia resuena.

Porque ni todo es para todos, ni todos valemos para todo. Y publicar no es dialogar (aunque sea un paso necesario) ni, si me apuras, comunicar. Porque si nos parece lícito cuestionarnos si un árbol que se cae en un bosque desierto hace ruido, una página de facebook que publica sin generar reacción, ¿comunica?

Tengo mis dudas.

Paz!

L.

 

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Lucas

Mi nombre es Lucas. Generación del 71. Soy Harlysta, esquiador y eMTBiker. Trabajando en el mundo del Marketing y la Comunicación desde 1994. Por cuenta propia desde 2006, ayudando a las marcas a (re)conectar con sus clientes. Y eso suele incluir repensar mensajes, beneficios, textos, estrategia de marca, canales, audiencias y formas de contarlo. Con un gran peso de todo lo digital, como es natural en estos tiempos.

Comentarios

  1. Egunon!!!

    ¿Has pensado que esos k de seguidores pueden ser robots comprados que tan solo abultan pero no interactúan?

    1. Muy buenas Alberto, claro que lo he pensado, pero:

      1).- No pueden ser TODOS comprados (las páginas ya tienen tiempo)
      2).- Incluso si lo fueran (que ya te digo que NO puede ser que tengas el 100% de likes falsos) creo que no invalidaría mi argumento/reflexión de la desconexión marca-usuario.

      La verdad es que nunca ha entendido esa necesidad de aparentar tener más fans de los que realmente tienes…

    1. Sin duda, pero el problema es que tanto el cómo como el cuándo están cada vez más influidos por factores externos a nosotros. Son las propias plataformas las que potencian determinados formatos (el video, por ejemplo) y las que, mediante sus algoritmos, deciden a qué publicaciones dar o no dar visibilidad. Esto hace que «acertar» con el cómo y el cuándo sea cada vez más una ruleta rusa… ;(

  2. «…una página de facebook que publica sin generar reacción, ¿comunica?» Está claro que no. Y es una gran cuestión, ¿porqué seguimos publicando contenido sin unos ojos, orejas y pensamientos a los que aspirar?. Igual hay que buscar otros caminos para llegar a nuestro público, tal vez recuperar el cara a cara, una comunicación más analógica y por ello sorprendente en estos tiempos que corren. Me ha encantado tu reflexión. Gracias 🙂

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