«If you are struggling to get your voice heard, I think you should spend more time on your message… not your volume»
El otro día le escuché decir esta frase a Matt D’Avela en uno de sus videos y me encantó. Creo que resume perfectamente la situación en la que muchas marcas se encuentran en este momento. Subiendo el volumen (tanto en sentido acústico como de cantidad) de su comunicación, para ver si así consiguen ser – por fin – escuchados por su audiencia… y no funciona.
Y no funciona porque en muchas ocasiones – la mayoría – el problema está en el mensaje, no en el volumen. Y claro, sabiendo cómo funciona ahora mismo la «cadena de distribución«, si tu mensaje no es relevante, no generará interacción, y si no genera interacción, será imposible – salvo que haya dinero por medio – que tenga visibilidad.
Y es que definir nuestro mensaje no es fácil. Por un lado, porque ha de dar de pleno en esa zona estrecha donde se cruzan lo que tú como marca quieres contar y lo que tu audiencia quiere escuchar. Y por otro porque ha de enfrentarse a un nivel de ruido ensordecedor, donde nuestra competencia no es (solo) la competencia del MundoReal™️, sino (también) las fotos de gatitos, de amaneceres y atardeceres rosas, los memes y las fotos de comida. Y en ese contexto, hacer que tu mensaje, y más cuando eres un fabricante de tornillos rosca-chapa, sea relevante, es tarea complicada. Pero es el camino a seguir si pretendemos convertir el ruido en recuerdo.
Por eso es tan importante ser capaz de definir tu territorio de marca, tu público objetivo, el beneficio que aportas a tus usuarios y desde ahí construir tu mensaje. Y dedicar más tiempo a eso que a salir ahí fuera a gritarlo. Porque al final, quien grita, acaba por molestar. Y no es eso lo que queremos, verdad? Pues eso.
Paz!
L.
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Hola.
Totalmente de acuerdo. Miro y observo las redes, los anuncios que se hacen y los que se intentan hacer y no oigo mas que gritos, como en los antiguos mercado: “lo mío es lo más barato” “ lo mío es lo mejor” o incluso “ eres tonto si no compras lo mío”. En la mayoría de los casos, las marcas no hablan, no conversan, solo quieren de ti tu respuestas comercial. Y lo la cosa empeora cuando una pequeña empresa piensa: uf estos no llegan al público, yo con mis vídeos voy a llegar y te inundan con chorradas, muy graciosas pero chorradas. Quizá debemos volver al principio de la vida, a decir cosas importantes, a compartir mensajes con valor.
Bueno vaya chapa…… a pasar buen fin de semana
Saludos
Lo has resumido mejor que yo, Isabel, es tal y como lo cuentas, lamentablemente, en demasiadas ocasiones. Ruido, ruido y más ruido, además ineficaz para ambas partes.
Gracias por pasar y por comentar!
L.
Corto, conciso y con lo justo. Excelente post!
Gracias Laila!