El otro día, presentando un proyecto, acabamos utilizando una expresión – lluvia fina – que creo que representa bastante bien lo que son – o al menos lo que yo considero que deberían ser – nuestras acciones en Social Media. De hecho, no me gusta siquiera el llamarlas «acciones«, ya que este término lleva implícito una fecha de inicio y una de fin, y para mi ésto del Social Media es más una nueva forma de ser, y de estar, que una sucesión de acciones en Internet.
Las empresas y las marcas están acostumbradas a las acciones «chaparrón de verano«. Esas en que no sabes muy bien cómo ni porqué, pero un buen día, te levantas, y te encuentras la ciudad empapelada con cartelería que te habla de una marca. Que te acercas a coger el autobús, o el metro, y las marquesinas, los mismos buses, e incluso las puertas de los taxis, te muestran al personaje famoso de turno cantándote las bondades de ese producto que hasta ese momento no conocías. Que pillas el periódico, y ahí lo tienes, el mismo personaje, a página completa impar, mirándote a los ojos con una sonrisa. El mismo gesto con el que te saluda desde la tele cuando llegas a casa reventado del curro. Pero como los chaparrones de verano, tan pronto llegan, se van, que ese chorrazo de agua no hay nube que lo pueda soltar durante mucho tiempo. Si te pilla de pleno, te deja empapado, pero en cuanto salen los primeros rayos de sol, el agua se evapora de las calles, las ropas se secan, y la vida sigue igual. Ni rastro de la lluvia, aunque recordamos que fue molesta mientras duró.
El Social Media es – o debería ser – otro rollo. Debería parecerse más a la lluvia fina que tan bien conocen en el norte de España. Esa que, cuando vamos de visita, y los «foranos» vamos a salir de pintxos decimos «va, tranquilo, que ésto no es lluvia«, y a la media hora estamos EMPAPADOS, aunque sin darnos cuenta. Es algo que está ahí, que no molesta, que no te impide hacer vida normal, que se mezcla con tu día a día….. pero que acaba calando. Así creo que ha de ser nuestra presencia como marca en las Redes Sociales. Ha de ser un contínuo caer de mensajes, de interacciones, de gestos, de imágenes, de actitudes; de compartir y de entremezclarse en nuestra vida, en definitiva. Pero sin pasarse. Sin molestar. Que parezca que no estamos, salvo que nos tentemos las ropas. Porque al final…. acabamos mojados.
Fíjate bien en la diferencia. De los primeros, los chaparrones de verano, nos protegemos con chubasqueros, botas y paraguas, o incluso buscamos refugio para que nos nos pille. Con lo segundo, la lluvia fina, simplemente convivimos. Qué querrías que hiciera tu target con tu marca? Protegerse y evitarla, o convivir?
Pues ya sabes, igual te toca olvidarte de abrir la llave de la manguera a tope como hacías hasta ahora, aunque fuera muy cómodo, y pensar en montar un sistema de canalización que acerque el agua a todas las plantas del jardin…. y llenarlo de nebulizadores. Te costará más tiempo, probablemente tendrás que contratar a alguien que te ayude a montar el sistema de riego, pero, si está bien montado, al final ahorrarás agua y, lo que es más importante, llegarás a más plantas. Y con un poco de suerte, le pillarás el gusto, y acabarás siendo tú quien ajuste la llave de paso, y los nebulizadores… y acabarás también empapado… y con una sonrisa !!
Paz !
Ese mismo concepto de «lluvia fina» es el que utilicé para diseñar el logotipo de http://www.endalia.com
Siempre nos dicen que cuando entramos en una empresa a hacer un proyecto, somos una revolución silenciosa (¿ninjas?): vamos cambiando la organización por dentro sin que se note… como la lluvia fina, que te empapa pero no te das cuenta…
Es la expresión que utilizo en mis cursos de social media. Muchos siguen pensando que solo es trasladar el megáfono a otro sitio, y no es así.
¡Qué bueno! Me gusta mucho lo que dices.
Curiosamente el otro día hablábamos con otros de «riego por goteo» vs «riego por aspersión» y creo que el objetivo es conseguir más con menos y no ser intrusivos
Gracias
Muy buen artículo, como viene siendo habitual. El problema que le veo yo a la lluvia fina es que para vender aire (que abunda mucho como línea de producto) hace falta el chaparrón porque con chirimiri no cuela 😉
Lucas, ¿Porqué me aparece un avatar encapuchado?
@Nico, el avatar que muestra es el que va asociado, con gravatar, a la dirección de email que has puesto. Y como has puesto kk@kk.com…. pues parece que alguien ha registrado esa dirección con ese avatar. Prueba a poner tu dirección de mail real. Verás como no pasa… 🙂
me ha gustado «el concepto», me ha gustado mucho como lo has explicado y eso que me encanta el sol, las vacaciones y llegar a casa y que no secarte, sin goteras, ya tu sabes 🙂
@Jorje lo importante es el «conceto», ya lo decían bien clarito en Airbag….
El orbayu de mi tierra es catarro asegurado para los del sur.
😉
Buena metáfora! pero y si llevan paraguas quienes queremos que se mojen?, ¿qué podemos hacer?
Lluvia fina, interesante metáfora y más aún si hablamos de determinados «productos» o marcas…
@sumunm si llevan paraguas habrá que esperar a que lo recojan o mejor aún, darles motivos para que decidan mojarse ; )
@sumunm, igual si están huyendo de nosotros no es muy buena idea perseguirles a manguerazos, no crees ? Precisamente eso es lo que hacen los antidisturbios. No parece la mejor estrategia para sembrar confianza o generar atracción y deseo…
Totalmente de acuerdo.
Cada vez más, la gente se cubre de esos chaparrones. Sin embargo, como bien dices aquí en el norte, nos acostumbramos a estar «acompañados» continuamente por esa lluvia fina, q no es molesta, que «va» con nosotros, pero te empapa tanto o más que el chaparrón para el cual siempre buscas abrigo. Y para el campo es mucho más beneficiosa esa lluvia fina que el chaparrón muchas veces más destructor que benefactor.
Y el Social Media está resultando ser eso, lo que te «acompaña», no te molesta, y cuando lo necesitas está ahí para recurrir a ello. Que consigue calar con su mensaje porque te resulta más beneficioso que molesto.
Saludos