No soy yo muy dado a hacer recopilaciones o resúmenes anuales, la verdad. Soy más de mirar hacia delante y hacer que de mirar hacia atrás y pensar. Aunque a veces toca.
Son ya unos cuantos años con el blog funcionando (empecé en esto de bloguear en 2005, aunque este blog en concreto nació en 2009) y de vez en cuando viene bien revisar objetivos. Pensar por qué y para qué hacemos las cosas, y analizar también los cómos.
Este blog en concreto nació como una forma de obligarme a seguir leyendo, seguir pensando y seguir construyendo una opinión propia. A no caer nunca en la trampa de repetir lo que otros cuentan, sino a construir, desde mi conocimiento y mis experiencias, mi propia historia. Nace como un lugar donde volcar conocimiento, donde compartir dudas y puntos de vista, y del que aprender. Tanto yo mientras lo escribo, como tú – o al menos eso espero – cuando lo lees. Un lugar donde volcar pensamientos vagabundos, que a su vez hagan pensar.
El último trimestre del 2015 fue muy ajetreado. Cada vez más clientes, más proyectos y más retos (afortunadamente), que también tienen como contrapartida negativa que el tiempo disponible para temas «no facturables» era cada vez más limitado. Y por cómo ha empezado 2016, diría que (y añadiré el «afortunadamente» de nuevo aquí) la cosa va, como poco, a seguir igual, y tiene visos de ir a más. Afortunadamente, repito. Por todo eso, sigo dando vueltas a cómo seguir encajando el blog en mi agenda semanal, porque tengo claro que lo que obtengo de él, me compensa.
Pero tengo que cambiar cosas. Lo primero que tengo que cambiar es mi manía de revisar demasiado antes de publicar. Me tengo que tatuar eso de que lo perfecto es lo contrario de lo bueno. La cabeza me va habitualmente a mil, y cuando me siento escribo los posts del tirón, pero luego lo tengo que pulir y repulir antes de darle a publicar. Y eso pueden ser sin ningún problema 2 o 3 horas. Y eso no puede ser.
Este año me gustaría atreverme a compartir más ideas y conceptos «en bruto«, menos pulidos, menos revisados. Y no lo quiero hacer así por comodidad ni por ahorrar tiempo, sino porque creo que eso va a enriquecer las publicaciones. Pasar del idea-documentación-borrador-formato-revisión-revisión-revisión-revisión-revisión-revisión-titulo-imagen-publicación, al idea-borrador-titulo-imagen-publicación. O algo parecido.
Quiero dejar de pensar en el «esto va a gustar« y pensar más en el «esto es interesante«, o en el «a ver qué piensan los demás sobre esto«. Recuperar en parte el espíritu original, recuperar la conversación y el diálogo, aunque eso suponga aparecer más abajo en rankings o disminuir el número de compartidos. Aunque quizás eso sea ir en contra de los tiempos donde lo que importe es aparecer everywhere.
Por otro lado, mi mayor problema es que tengo más ideas que tiempo, y eso me lleva por la calle de la amargura. Muchos días descarto ideas o posts porque literalmente no tengo tiempo de escribir el post. Y eso hace que lleve ya unas semanas pensando en… ¿y si lo grabo en video? ¿me lanzo a publicar mis pensamientos vagabundos en video? Reconozco que la idea me resulta atractiva (15 minutos puedo encontrar durante el día para grabar, y otros tantos para editar y publicar) aunque reconozco que aún me debato entre las dudas. Que si el equipo, que si el audio, que si la edición… ¿serán excusas? Quizás lo sean, qué se yo. Porque una cosa es que te graben profesionales hablando de lo tuyo – como pasó en la muy recomendabilísima serie de David Bonilla, en la que yo aparezco en un episodio, ayudándole a centrar el tiro con runnics, el awesómico comparador de zapatillas de running – y otra muy distinta hablar tú sólo al móvil en la calle, en el coche o en la oficina.
Aún no se qué nos traerá el 2016, pero algo nos traerá. Y será bueno. Será lo mejor que sea capaz de hacer. El cómo lo haga… eso es casi irrelevante. Pero hacerse, se hará.
Paz!
PS.- Sugerencias, opiniones o recomendaciones son siempre bienvenidas. Sobre todo lo que concierne al blog o lo que tú quieras. Sobre temas, formatos, contenidos o lo que sea. Por ejemplo ¿ves sentido a lo de probar en video? ¿qué harías distinto? ¿qué echas en falta? ¿qué sobra? ¿sobre qué te gustaría ver más contenidos? En cualquier caso, comentes o no, gracias por llegar hasta aquí. Y si lo que has leído te ha hecho pensar… objetivo logrado!
Yo seguiré siendo fan hagas lo que hagas en 2016. Pero te diré que agradezco leer posts interesantes que se notan que están muy trabajados y bien esculpidos. Que el tipo o la tipa del blog se toma su tiempo y trabajado para transmitir su mensaje útil.
En cuanto al vídeo, estaba esperando que dieras el salto para animarme yo 😉
No me refiero a publicar basurilla, Marta, sino a que, muchas veces, creo que me pierdo en los detalles. Que si una negrita aquí, una cursiva allí, buscar un enlace más en el texto, cambiar una palabra, repensar la frase, mejorar el cierre, bucear entre cientos de imagenes para la portada, etc, etc que no tengo muy claro si son manias perfeccionistas mías que realmente no aportan tanto valor como el tiempo que llevan, no se si me explico.
Mi intención es seguir publicando cosas que merezcan la pena publicar, pero quiero intentar darme esa libertad de poder ser algo más «ligero» en la edición.
Otra cosa es que luego lo consiga, que nos conocemos… 😉
En cuanto a lo del video… reconozco que me atrae, pero me falta ese empujón final para lanzarme al barro. Reconozco que me impone un poco. No es pudor (de eso creo que ya no me queda), pero si que le tengo respeto. Me impone un poco la obligación de continuidad, y el no saber si mis temas de opinión son susceptibles de ser consumidos en video, que lo veo como un medio de contenidos más generalistas. Pero me mola, me mola. Supongo que lo acabaré haciendo… 😉
Gracias por comentar!
Feliz año, lleno de antxoas. 😛
Te había entendido perfectamente (porque trabajas los textos y transmites el mensaje exacto). Ni se me había pasado por la cabeza lo de la basurilla. Me refería precisamente a esa meticulosidad y el cuidado de los detalles. A mí me molan.
Feliz año, maño.
Yo, cuando escribo, pienso en que quizás un día a alguien sirva lo que he publicado.
En tu caso eso sobra decirlo porque está claro que sirve a muchas personas. Yo también pienso en eso al escribir, me gusta pensar que lo que escribo «hace pensar» a quien lo lee, aunque reconozco que el objetivo inicial es puramente egoísta: escribo porque me gusta y porque me obliga – a mi – a pensar y a ordenar esos pensamientos vagabundos que tantos inputs simultáneos al cabo del día me generan.
Hola Lucas, ¿y si además de vídeo das un paso más?
Un vídeo enlatado está bien, pero quizás una conversación da más juego. Te propongo guardes media hora a la semana para comentar sobre un tema (o varios), pero en directo e incluso interactuando con la gente. El modelo sería un tipo streaming, con la posibilidad de recibir comentarios, preguntas, … vía Chat, por ejemplo. Además siempre podrías grabar esa media hora y colgarla en la Web.
Complicado es, pero por ideas que no sea
Un abrazo!
Pues la idea ya me gusta, Oscar!! Igual se podría hacer un híbrido, en plan «manda tus preguntas» o #PreguntasConBarba o similar, y con ellas hacer el video. Más que nada porque no se si tengo poder de convocatoria como para congregar gente a una hora concreta frente a la cámara, y no hay nada más triste que un streaming sin público…
Creo que te infravaloras, jeje
Voy a echar en falta el poder comentar… porque no tiene mucho sentido publicar el tema en vídeo y recibir los comentarios en texto. No creo que funciones, la verdad. Si publicas tus post en vídeo serás «consumido» por los televidentes digitales.
Quizás deberíamos todos echarle valor todos y construir una plataforma «de hablar» (¿la barra?)
Hace un siglo (aproximadamente 15 años) ya sonaba la historia. Entonces no existía la tecnología necesaria para soportar un chat en vídeo. Ahora sí. ¿Conoces alguna? Aunque sea «en construcción»…
Vaya, entonces qué son los comentarios de youtube? una ilusión óptica? Porque la plataforma está muy muy viva, y llena de comentarios…
Además, en el hipotético caso de lanzarme a esa aventura podría, por ejemplo, grabar el video, subirlo a youtube, que allí tuviera su recorrido, y además embeberlo en un post aquí en el que poder aportar algún texto adicional, y así poder seguir recibiendo comentarios y generando conversación en el blog.
Por ejemplo.
Vamos, que por ocasiones de comentar, no va a ser! 😉
Que tal Lucas? Enhorabuena por el trabajo que haces, la idea de grabar videos es muy chula. Te lanzo una alternativa; recoger en videos cortos eso que tienes en la cabeza revoloteando, sean reflexiones, pensamientos, divagaciones, ideas interesantes etc. Lo que sea, pero contribuyes, enciendes el interruptor de la gente, marcas el «ON», pinchas la curiosidad, no hace falta una gran edición, sino que entorno a 3 o 4 min de duración, nada sofisticado, directo, claro y al plato, gracias. Importante, no te quitara mucho tiempo del que escaseas, gracias y saludos.
Esa es un poco la idea, aunque la verdad es que hasta que no me ponga en serio con ello (he grabado y descartado ya dos videos) no tengo muy claro el formato en el que lo voy a acabar subiendo…
Gracias por comentar!