El servicio como parte del producto

Un buen producto, entregado en un entorno de mal servicio, se convierte en un mal producto, porque la experiencia de compra lo arruina. Debemos tener en cuanta esto a la hora de plantear nuestro ciclo de relaciones con nuestros clientes, y eso incluye implicar a todos los que tienen contacto con el cliente final. Desde el primero hasta el último.

Tus clientes son egoistas. Asúmelo. Acéptalo. Sácale partido.

Los usuarios cuidan de sus intereses, no de los tuyos. Ellos buscan cumplir SUS objetivos, y si los tuyos no están alineados con los suyos, surgen los problemas. Problemas que serán aún más graves si SUS expectativas son mayores que el alcance de tu producto o servicio. Pero no te agobies. Es una oportunidad magnífica de mejorar tu oferta. Sácale partido!