En ocasiones tienes la sensación de que lo que antes era apasionante se está convirtiendo en rutina. Pierdes la ilusión, la frescura y la chispa. Y toca actuar. Porque esperar resultados distintos haciendo lo mismo de siempre no es inteligente.
En ocasiones tienes la sensación de que lo que antes era apasionante se está convirtiendo en rutina. Pierdes la ilusión, la frescura y la chispa. Y toca actuar. Porque esperar resultados distintos haciendo lo mismo de siempre no es inteligente.